Gestión sostenible de sistemas de playas con Posidonia

Aunque hay pruebas científicas claras y un consenso sobre la función y relevancia ecológicas de la Posidonia oceanica y las dunas en ecosistemas costeros, la ausencia de un marco legal sistemático y las percepciones sociales existentes están impidiendo una gestión sostenible. Además, muchas localidades y participantes locales exigen soluciones sostenibles para la gestión de arribazones. Se necesitan nuevos enfoques de gestión, que deben centrarse en la conservación del ecosistema costero integrado, considerando cómo afectan las prácticas de gestión a la salud de todo el ecosistema y a la resiliencia del litoral. Estas directrices incluyen una estrategia de gobernanza y un plan de acción para enfrentarse a estos retos, al ofrecer:

• Una actualización de las percepciones existentes que tienen los diferentes participantes y el marco de la política existente para la gestión de arribazones de Posidonia;
• Una guía sobre los métodos y las herramientas existentes para el uso sostenible de arribazones de hierbas marinas y sistemas de dunas asociados; y
• Un marco de acción para el Mediterráneo y un kit de herramientas con orientación local que incluye recomendaciones para una gestión sólida de la Posidonia y los sistemas de dunas.

Infraestructura tecnológica

En las directrices no se especifican requisitos tecnológicos.

Formación

El personal debería recibir formación cada año sobre políticas de limpieza de playas, características del litoral con Posidonia y cómo reconocer y mitigar los impactos.

Inversión

En las directrices se incluye una estimación aproximada de los costes asociados a cada opción de retirada (altos-bajos).

Concepto

Las directrices incluyen un marco de referencia para la toma de decisiones, especialmente para arribazones de Posidonia de gran tamaño, que tiene en cuenta las funciones de las playas (protección y ocio) y la integración del ecosistema. El objetivo estratégico es lograr la gestión sostenible de las playas con Posidonia a la vez que se mantiene el valor medioambiental en algunas zonas (p. ej., áreas protegidas) y el valor recreativo en otras. El nivel táctico refleja las tipologías de las playas para tener en cuenta las expectativas sociales y las percepciones actuales (a nivel local), a la vez que se mantienen la integridad, la función ecológica y los valores medioambientales del litoral con Posidonia. A nivel local, antes de llevar a cabo ninguna acción, una evaluación comparativa ayudará a definir una línea de base: la dinámica existente de la zona costera y la deposición de hierbas marinas y formación de arribazones en las playas.
A nivel operativo, las medidas para gestionar los arribazones de Posidonia se identifican e implementan: a) para mantener el ecosistema (minimizar la interferencia con el proceso de deposición de arena y nutrientes por parte de los arribazones); b) para mejorar la situación si existe erosión o se necesitan actividades de recuperación; y c) para limitar el impacto sobre el valor recreativo de las zonas aledañas y para garantizar que los usos recreativos existentes y planificados están equilibrados con el mantenimiento de la integridad del ecosistema. Deberían llevarse a cabo valoraciones de viabilidad de cada opción para la evaluación. Por último, la monitorización y evaluación de las intervenciones consisten en seleccionar una serie de indicadores para monitorizar el estado del medioambiente costero, incluidas las playas y las dunas asociadas. Se incluyen recomendaciones sobre la limpieza de playas (evitar el uso de métodos mecánicos en la medida de lo posible), las opciones de eliminación, el acceso a la playa de vehículos de transporte, el uso de los arribazones y la cuestión de los programas de certificación de playas.

Frecuencia de implementación recomendada

El marco de gestión propuesto por estas directrices debería revisarse periódicamente para tener en cuenta cualquier variación en los sistemas ecológicos y socioeconómicos implicados en la evaluación y los resultados de la gestión de arribazones de Posidonia.

Cada uno de los enfoques para retirar arribazones de Posidonia puede encontrarse con limitaciones específicas, que deberían considerarse detenidamente con antelación. Algunas ya se han identificado en las directrices para las siguientes técnicas: eliminación lejos de la orilla, reubicación en un punto más elevado de la playa, eliminación fuera de la playa, uso de maquinaria pesada en playas de arena y uso de maquinaria en dunas. Como ejemplo indicativo, la eliminación lejos de la orilla de los arribazones retirados de las playas puede amenazar a la persistencia y productividad de hierbas marinas y otros hábitats marinos y reducir la calidad del agua. Otro ejemplo es la reubicación en un punto más elevado de la playa, que puede reducir el reciclaje de nutrientes y arena de vuelta al mar, lo que supondría costes de mantenimiento superiores.

Resultados cuantitativos

La implementación eficaz de estas directrices mejorará considerablemente la gestión de arribazones de Posidonia en playas y dunas mediterráneas.

Posibilidad de transferencia

Cualquier gestor de AMP del Mediterráneo puede aplicar estas directrices, dado que incluyen recomendaciones generales que son aplicables a toda la cuenca mediterránea. Las directrices también incluyen una estrategia integrada transnacional y un plan de acción, que pretende orientar las políticas regionales y nacionales y a los organismos de financiación e instituciones de investigación hacia la creación de condiciones adecuadas para implementar prácticas de gestión de playas y costas sostenibles a lo largo del Mediterráneo.

• La Posidonia oceanica forma grandes praderas que están ampliamente distribuidas por el litoral mediterráneo entre la superficie y 44 m de profundidad en las aguas más claras. Las estimaciones recientes sugieren que su distribución conocida general es de aproximadamente 12 247 km2, con más del 50 % en territorio de la UE (Telesca et al., 2015).

• Se ha calculado que en algunas playas mediterráneas puede haber hasta 7000 toneladas de depósitos de hierbas marinas durante el invierno.